Después de mucho insistir, la mujer que tanto me propuse conquistar…. Finalmente aceptó salir conmigo!! Esa tarde salí con el propósito de iniciar una nueva relación en mi vida. Mi cita era a una cuadra de mi casa, así que opté por caminar.
En
el trayecto, hubo un viejo sentado en el porche de su casa que llamó mi
atención. Sentado en una banqueta, con los pies descalzos, su bigote
blanco y sus arrugadas manos sosteniendo un bastón viejo de madera. Sus
pantalones, que arremangados dejaban libres sus pantorrillas, y una
camisa blanca, rota por el tiempo y mal abotonada; miraba la nada desde
la precisa y envidiable perspectiva que da la experiencia.
El viejo lloró, y en su única lágrima expresó tanto, que me fue muy difícil acercarme, preguntarle, o siquiera consolarlo.
Por
enfrente de su casa pasé mirándolo y al cambiar su mirada fijándola en
mí, le sonreí y lo saludé con un gesto, aunque no crucé la calle, . es
que tenía que llegar a tiempo a la cita con la chica que finalmente
había aceptado salir conmigo después de varias semanas de insistencia…
.no me animé, además pues no lo conocía y si bien entendí, que en la
mirada de aquella lágrima, demostraba una gran necesidad, seguí mi
camino pero sin lograr convencerme que hacía lo correcto por no seguir
los impulsos de mi corazón.
Después
de varias horas de conversar con mi nueva conquista, la imagen del
viejo en la banqueta no podía apartarla de mi mente. -’¿Por qué te
preocupas por alguien que no conoces?. Todos tenemos problemas y no
siempre encontramos ayuda’- fueron las palabras vacías de mi
acompañante. que decepción!!
En
mi camino guardé esa imagen fundida en mis recuerdos; su mirada que
encontró la mía en el infinito de la nada, ese lugar donde se encuentran
mas que decepciones, ya que inmediata e imperdonablemente le había
negado mi compañía….. y todo por ir en busca de mi egoísta felicidad.
Traté
de olvidarme. Caminé rápido, como escapándome. Llegué a casa esperando
que el tiempo borrara esa presencia… . Pero esa lágrima no se borraba. –
‘Los viejos no lloran así por nada.’ Me dije.
Esa
noche me costó dormir, pues la conciencia no entiende de horarios, y
decidí que a la mañana siguiente volvería a la casa, y conversaría con
él… !!ESA NOCHE SURGIÓ UN PROPÓSITO!!. .tal y como entendí me lo había
pedido; y luego de vencer mi pena, logré dormirme.
Muy
temprano desperté aquél día, recuerdo preparé un termo con café, compré
unos panecillos y muy deprisa fui a la casa, convencido que tendríamos
mucho que conversar. Golpeé a la puerta. Salió otro hombre: – ¿Qué
desea?- preguntó el hombre, mirándome con un gesto extrañado.
Y
contesté: – Busco al anciano que vive en esta casa- -Mi padre murió ayer
por la tarde-Dijo entre lágrimas. – ¡Murió!- Dije decepcionado.
Las
piernas se me aflojaron, la mente se me nubló y los ojos se me
humedecieron. -¿Usted quien es?-Volvió a preguntar: – En realidad,
nadie.- Contesté y agregué: – Ayer pasé por la puerta de su casa, estaba
su padre sentado y vi que lloraba, y a pesar de que lo saludé no me
detuve a preguntarle que le sucedía, pero hoy volví para hablar con él,
aunque veo que ya es muy tarde.-
Usted
es la persona de quien hablaba en su diario – Dijo y entonces me invitó
a pasar. Luego de servir un poco de café, me llevó hasta donde estaba
su diario, y en la última hoja, sólo rezaba: – hoy me regalaron una
sonrisa, y un saludo amable. soy muy feliz, es un día bello- Tuve que
sentarme, fue difícil de digerir aquello.
Me
dolió el alma de sólo pensar lo importante que hubiera sido para ese
hombre que yo cruzara aquella calle. Me levanté lentamente y al mirar al
hombre le dije:…. – Si hubiera cruzado la calle y hubiera conversado
unos instantes con su padre.- Pero me interrumpió y con los ojos
humedecidos de llanto dijo: – Si yo hubiera venido a visitarlo al menos
una vez este último año, en lugar de andar tratando de encontrar mi
felicidad satisfaciendo mis gustos y necesidades personales, quizás el
saludo que usted le dio y su sonrisa, no hubieran significado tanto a mi
padre…
Que
decepción!!- Andamos por la vida buscando nuestra propia felicidad, y a
veces lo hacemos tan egoístamente sin importar que, al conseguirla,
nuestra felicidad sea la causa de la infelicidad de alguien más y peor
aún, cuando es la infelicidad de aquel que nos ama.
El amor de la pareja, la vida, la salud, el perdón, la amistad, el tiempo, son regalos de Dios que siempre los damos por sentado y lamentablemente son apreciados hasta que los hemos perdido.
¿Quién te asegura que habrá vida para tus propósitos?
Quizás en este instante, sin que tu lo sepas… ya es muy tarde, pero si tu sabes que no es así.¿Qué estás esperando?
Quizás en este instante, sin que tu lo sepas… ya es muy tarde, pero si tu sabes que no es así.¿Qué estás esperando?
Aprecia lo que tienes hoy, que puede irse mañana.
Cuida el amor que te ofrecen.
Si perdonas, serás perdonado .
Vive pensando que hoy puede ser el último día de tu vida .
Pero vive pensando que la vida se hace a cada Instante.
Las decisiones que tomes hoy, determinan tu futuro mañana .
El dolor es pasajero, la experiencia no.
El dolor es el mejor maestro.
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